A mí, personalmente, me encantan los tiburones. Me encanta ver documentales sobre ellos y estudiarlos. Pero sobre el tiburón Mako no supe de su existencia hasta que un conocido de la familia me regalo un diente auténtico de tiburón. De hecho, me enseñó la dentadura completa. Y me regaló un diente. Le pregunté, pero no supo decirme de qué especie se trataba. Y pues al llegar a casa, busqué por Internet fotografías de dientes de tiburón. Entonces me di cuenta, de las pocas especies de tiburón que conocía. Y por fin encontré un diente que se parecía al mío. Ponía debajo que se trataba de un tiburón Mako. Busqué dientes de esa especie de tiburón y comprobé, que, efectivamente, mi diente pertenecía a este escualo. Y me puse a investigar sobre este tiburón y esto es lo que sé de él. No es mucho lo que ''descubrí'' pero a mí me hizo mucha ilusión buscar la especie a la que pertenecía mi diente.
Este tiburón puede medir entre 3'5 y 4 metros y pesar hasta los 700 o 750 kg. Es un tiburón bastante grande. El tiburón Mako, es un tiburón robusto, fuerte y muy veloz. Alcanza los 124 km/h siendo el pez más rápido del océano. Es de la familia del gran tiburón blanco, pero de menor tamaño. Además el Mako, suele vivir en aguas más profundas que su ''primo'' aunque alguna vez puede adentrarse en costas y puertos en busca de alimento. Este tiburón es famoso por su agresividad. Se conocen varios casos de tiburones Mako que han atacado a humanos.
Este animal, se convirtió en un pez muy codiciado por los amantes de la pesca deportiva y de riesgo, por su gran fuerza y agresividad. Lo que sólo consiguió que este tiburón se volviese más agresivo. Ahora, se sabe de algunos ejemplares que han llegado a saltar a las cubiertas de pesqueros con el fin de atacar.
Caza todo tipo de presas. Desde pequeñas sardinas y caballas hasta calamares, tortugas marinas, delfines, peces espada, marlines e incluso otros tiburones. Se sabe que incluso algún ejemplar a llegado al extremo de atacar a cetáceos. De hecho, es el depredador principal del pez espada. Se considera un tiburón bastante peligroso e incluso más agresivo que el tiburón blanco.
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